Parece que después de unos cuantos años, por fin este dibujo vio la luz, el scratch no resulto tan complicado de realizar, es una técnica que me gusta mucho, sobre todo porque practico mucho los claroscuros. Con el scratch te puede pasar con facilidad que se te vaya la mano con los brillos y si en un momento no piensas en la luz que quieres, debes dar por perdida la iluminación que tenías planeada y seguir practicando con otra ilustración. En fin, seguiremos ensayando lo que alguna vez en la universidad me enseñara mi profesor Guillermo de Gante (maaaaestrazo por cierto).
